¿Qué significa ser “Adulto”? ¿Qué cosas son “esperables” que pasen en el mundo de una mujer adulta? ¿Hasta dónde somos capaces de llegar para cumplir con determinados estereotipos? ¿Qué pasa cuando, en el afán de cumplir con las exigencias sociales y familiares, nos aventuramos en una carrera contra el tiempo que nos lleva nada más ni nada menos que desoír nuestros deseos genuinos?
Ida es la protagonista de esta historia. Está soltera y no tiene hijos. Tampoco sabe si los quiere y se pregunta “¿Será ahora? ¿Será ahora cuando sienta esa gran emoción, cuando entienda que esto no puedo perdérmelo? ¡Esto! Tan milagroso que no puedo aplazarlo más (..)”
El paso del tiempo la lleva a pensar que para algunas cosas como la maternidad, pronto podría ser tarde. Se plantea entonces la posibilidad de congelar óvulos, quizás, con la ilusión de cumplir con el mandato social que dictamina lo esperado para una mujer de su edad.
“Algún día, me dije tumbada en la silla del ginecólogo, algún día tendrá que funcionar, y el mero hecho de tenderme en esa silla me hizo creer que ocurriría, tanto el novio como lo del niño, solo estar allí era ya una promesa de que algún día vendría algo mas, algún día”
Ida también es hija, hijastra, hermana, cuñada y la historia irá mostrando la complejidad de los vínculos familiares y su transformación a través de situaciones cotidianas pero también momentos incómodos, emociones crudas que a veces cuesta reconocer pero que, sin embargo, también forma parte de nosotros.
Las expectativas sobre la adultez, el “deber ser” y lo que callamos para seguir perpetuando un lugar dentro de la complejidad de los vínculos familiares, son solo algunos de los temas que a través de Ida, la protagonista, se irán develando a lo largo de las 156 páginas que componen la edición de Nórdica Libros.
Personalmente me resultó una novela de fácil lectura, con situaciones que me llevaron a reflexionar sobre los desafíos de cara a la adultez y la posibilidad de conectarse con lo que verdaderamente deseamos, aunque ésto, pueda no necesariamente encajar con lo esperado por otros.